Las mejores variedades para hacer hachís

Un hachís de calidad necesita unas flores de marihuana a la altura. Las mejores cepas para hacer hachís han de tener un amplio perfil de terpenos que aporten a la extracción un intenso sabor y aroma, así como un nivel de THC o CBD elevado para otorgarle una potencia digna de una elaboración como esta. Por lo que, a la hora de escoger una cepa, siempre serán un acierto aquellas que den mejores resultados con la producción de BHO. 

Mejores variedades para hacer hachís

Ice de Royal Queen

El nombre de esta variedad, Indica Crystal Extreme (ICE), su mejor característica: una gran productora de resina. ICE es un polihíbrido formado por tres cepas muy potentes como son una afghana pura, una Northern Lights y una Skunk. 

Como cualquier índica, se desarrollará en forma de arbusto, compacto y ramificado. Es una cepa perfecta para interior ya que no crecerá más de un metro, aunque también es discreta para exterior, donde no alcanzará una altura mayor a 2 metros y desarrollará por completo sus cualidades organolépticas bajo los rayos del sol. 

ICE es una gran productora, en interior, generará hasta 450 gr/m² en 8-10 semanas, mientras que en exterior se puede elaborar hasta 550 gramos por planta. La intensidad aromática de esta cepa junto con su gran cantidad de tricomas, la convierten en una variedad ideal para hacer hachís de calidad. Además, se trata de una ejemplar realmente bello, pues durante las últimas semanas de floración, sus flores se quedarán repletas de resina, adornando la planta con un manto blanco brillante. 

Entre los efectos de ICE resalta su genética índica que provoca una relajación intensa en el todo el cuerpo, perfecta para tomar tras una jornada dura. Irá acompañado de un marcado sabor a especias y tierra, con notas de menta que no dejarán indiferente a ningún fanático con experiencia haciendo hachís. 

White Widow de 00 Seeds

La clásica White Widow es otra candidata perfecta para hacer hachís gracias a su gran productividad de cogollos densos y resinosos.  Esta planta tan vigorosa que es adecuada tanto para principiantes como para expertos, que conseguirán sacarle el máximo partido a esta variedad tan potente capaz de alcanzar un porcentaje del 19% de THC. 

No obstante, para los que prefieren hacer hachís con efectos medicinales, 00 Seed también cuenta en su catálogo con la versión White Widow CBD, que puede crear hasta un 16% de este cannabinoide junto con un 5,5% de THC. 

En interior no crecerá más de 100 cm y estará lista para cosechar en un máximo de 55 días de floración. A pesar de su corto período de floración, en manos profesionales puede llegar a producir hasta 600 gr/m². En exterior lucirá más su vigorosidad, pues puede estirar hasta los 2,4 metros de altura. 

Los cogollos de White Widow dejarán en el extracto un aroma afrutado y especiado junto con un efecto cerebral intenso inconfundible de esta cepa. No hay duda de que hacer hachís con White Widow es una de las mejores opciones para conseguir un producto potente y de calidad.

Mr. Sour-R de Mr. Hide Seeds

El cruce de Sour Diesel y la Big Bud ha dado lugar a la aromática y gran productora de resina Mr. Sour-R, lo que la convierte en una variedad perfecta para hacer un hachís verdaderamente perfumado con unas cualidades organolépticas únicas. De hecho, esta cepa ha sido reconocida con el segundo premio en la categoría Hash profesional en la THC Valencia de 2017. Proviene del cruce explosivo entre Sour Diesel y Big Bud, las que le otorgan unas características envidiables.

Aunque los ejemplares de esta planta no destaque por su productividad, sus cogollos cargados de resina junto con su gran aroma que impregna cualquier extracto, conseguirán un hachís de calidad con un marcado olor a limón ácido con pinceladas dulces y sabor potente a diesel entremezclado con frutas cítricas.

En interior, Mr. Sour-R producirá hasta 400 gr/m² en no más de 8 semanas de floración. En exterior, los aromáticos cogollos estarán listos para cosechar un poco más tarde, a principio o mediados de octubre.

Moby Dick de Dinafem

Esta variedad, haciendo honor a su nombre, es un verdadero monstruo en todos los sentidos. Moby Dick es una planta que estira muchísimo por lo que, si se planta en interior, no es recomendable darle más de tres semanas de crecimiento ya que durante la floración sigue aumentando de tamaño hasta duplicarlo o triplicarlo, según la forma de cultivo. 

Además, es una planta fácil de cultivar a pesar de necesitar mucho alimento para desarrollar sus grandes y resinosos cogollos. Los buenos resultados que da la convierten en una planta ideal para hacer hachís tanto a principiantes como a expertos.

La genética sativa dominante (40%) de esta planta explica su gran crecimiento. Proviene de unos parentales igual de potentes y muy conocidos, pues Dinafem ha juntado una Haze pura con una White Widow seleccionada minuciosamente. 

El resultado de hacer hachís utilizando las flores de Moby Dick será un producto muy aromático y sabroso. Resaltará una intensa mezcla de cítricos, especias e incienso, con pinceladas a cedro y a Haze.  Por supuesto, Moby Dick también tiene un efecto devastador con características sativas, es potencialmente psicoactivo y narcótico, acercándose a la psicodelia, de larga duración. Esta cepa es tan demoledora que dejará hambriento a todo el que la pruebe. 

Todas estas características se complementan con una gran producción. En interior dará hasta 650 gr/m² tras 60-70 días de floración y, en exterior, en manos expertas y con los cuidados óptimos, este gigante producirá hasta 1500 gramos de cogollos por planta que estarán listos para cosechar a mediados o finales de octubre. Sin duda una cepa que permite hacer hachís abundante, potente y de una calidad excepcional. 

Forbidden Cake de Elev8 Seeds

Esta variedad está formada por dos cepas muy populares entre los entendidos y aficionados al mundo de la marihuana. Elev8 Seed ha mezclado un potente fenotipo de Wedding Cake con una de las variedades favoritas para hacer hachís por sus intensos aromas: Forbidden Fruit. Como resultado llega la Forbidden Cake, cuyos ejemplares presentan un gran tamaño bajo las condiciones de cultivo adecuadas tanto en interior como en exterior, donde resaltará por su producción.

Los cogollos de Forbidden Cake estarán listos para ser cosechados tras 8-9 semanas de floración, sumando una producción de unos 500 gr/m² aproximadamente. En exterior, en cambio, puede doblar la producción en manos de profesionales, estando listos en octubre. Las flores de esta planta son ideales para hacer hachís ya que son gordos y tan resinosos que semejan a un caramelo muy azucarado, lo que los convierte en una materia prima perfecta para este fin o cualquier otro tipo de extracción. 

Además, el efecto de este hachís hecho con Forbbiden Cake es para todo tipo de cannabicultor, ya que otorga una dosis de euforia que sube el ánimo, terminando con una relajación corporal y mental perfecta para descansar plácidamente. De sus parentales ha heredado un aroma algo complejo en que se aprecia una mezcla de fruta madura, gas y el dulzor de las cookies. De hecho, su fuerte aroma obligará a ventilar el ambiente. 

Todas estas variedades de cannabis son ideales para realizar cualquier tipo de hachís, tanto en seco mediante tamizado o utilizando métodos más sofisticados como la extracciones Ice O Lator. Por supuesto, el perfil de terpenos y la gran calidad de estos cogollos, permitirán llevar a cabo extracciones de cualquier otro tipo.