Hojas amarillas en el cannabis
Las hojas amarillas en la planta de marihuana son uno de los síntomas más comunes que sufre el cannabis durante su desarrollo y debe ponernos en alerta ya que puede ocurrir por varias razones: falta de nutrientes, exceso de riego, plagas y ataques de insectos, podredumbre de raíces, etc. Observar diariamente el cultivo, prevenir y remediar lo antes posibles los problemas que aparezcan; es fundamental para conseguir una cosecha exitosa.
Principales causas de aparición de hojas amarillas en la marihuana
Quemadura causada por los focos
Colocar las lámparas de cultivo interior a la altura adecuada es una de las claves del éxito de un cultivo de cannabis. Una luz demasiado cerca de las plantas les provocará quemaduras en la zona apical que se traducirán en cogollos y hojas amarillentas en esta área. Al contrario, una distancia excesiva provocará el espigamiento de la marihuana.
Por otro lado, la falta de intensidad de la luz causará demasiadas sombras en la planta, cuyas hojas empezarán a amarillear desde abajo hacia arriba hasta desprenderse y caer.
Solución
En general, los focos de cultivo han de mantenerse a unos 60 cm de la zona apical de la planta y unos centímetros más cerca durante la floración. Evidentemente, conforme vaya creciendo, habrá que ajustar la altura de las luces. Asimismo, las luces deben tener la intensidad adecuada para que reciban la cantidad de luz que las plantas de cannabis necesitan.
Exceso o falta de riego
Un riego excesivo aumentará la humedad del sustrato provocando la aparición de hongos y otros patógenos en las raíces, lo que llevará a la podredumbre del sistema radicular de la planta.
Por el contrario, un riego insuficiente provocará la falta de nutrientes en la planta, que frenará su desarrollo. En este contexto, las hojas de la marihuana también se tornan amarillas.
Solución
En el caso de que el riesgo desproporcionado no haya causado grandes estragos en la planta, bastará con dejar secar el sustrato y aplicar buenas prácticas de riego. Es decir, regar únicamente cuando la capa superficial del riego esté seca. Si ha habido podredumbre, uno de los mejores tratamientos es introducir microorganismos beneficiosos en el sustrato con el objetivo de combatir los microorganismos dañinos que están atacando el sistema radicular. La planta se irá recuperando y transformará el color amarillo de las hojas en un tono verde saludable.
Olas de calor
Una temperatura superior a los 28ºC impide a las plantas de marihuana realizar la fotosíntesis de la forma adecuada, por lo que no se desarrollará con normalidad. Como consecuencia, sus hojas se tornarán amarillas.
Solución
En interior se arreglará colocando ventiladores o encendiendo el aire. En exterior, la única solución es mover la maceta a una sombra cercana o improvisar un sombreado en tierra madre y confiar en que el calor dure pocos días.
Plagas y enfermedades
Las plantas de marihuana pueden sufrir la plaga de varios insectos, ataques de microorganismos, y daños sufridos por criaturas más grandes como son las mascotas. El daño se puede producir en la parte aérea del cannabis (trips, pulgón, moscas del mantillo…) o en las raíces (patógenos fúngicos y nematodos). Muchos de estos problemas causarán un color amarillo en las hojas de la marihuana.
Solución
La prevención es una de las mejores soluciones a las plagas y enfermedades. Añadiendo hongos micorrícicos y otros seres beneficiosos para el suelo, la zona radicular será mucho más resistente y se desarrollará de forma más vigorosa. Para que las plagas no lleguen hasta el cannabis, una buena praxis es plantar especies compatibles con la marihuana y que la defienda de estas plagas.
Para los animales más grandes habrá que vallar el cultivo, mientras que si ya hay una plaga establecida en la planta habrá que utilizar los productos necesarios para su extinción si todavía no es demasiado tarde. Así, las hojas amarillas recuperarán su color natural.
Excedente o carencia de fertilización
Una de las causas más comunes del color amarillo en la marihuana es un déficit de nutrientes. Durante la etapa de crecimiento, una carencia de nitrógeno será la causa principal de este color en las hojas; durante la floración, de potasio y fósforo. Como consecuencias, las puntas foliares comienzan a amarillear hacia el interior. Más tarde se enrollan en sí mismas.
Con un exceso de nitrógeno, las hojas se vuelven verde brillante muy intenso. Si no se remedia, la situación desembocará en una quemadura por nutrientes provocado por un copaso en la planta, ya que es incapaz de absorber una cantidad tan elevada de alimento, lo que también hará amarillear las hojas.
Solución
Para corregir un déficit de nutrientes basta con ajustar la dosis en el agua de riego. Sin embargo, una sobrenutrición es más difícil de arreglar. El primer paso es llevar a cabo un lavado de raíces con agua pura para eliminar cualquier exceso. A continuación, se debe empezar a alimentar a la planta de forma adecuada.
Nivel de pH incorrecto
Para controlar adecuadamente el nivel de pH que necesita un cultivo de cannabis hay que tener en cuenta el medio en el que se ha plantado.
- Cultivo en suelo: pH de 6-7
- Cultivo en coco e hidro: pH de 5.5-6.5
Cuando el nivel de pH en la planta esté descompensado, no podrá absorber la totalidad de los nutrientes, por lo que detendrá su desarrollo. No sólo se hará visible en la lentitud de su crecimiento, sino que las hojas de la marihuana se volverán amarillas.
Solución
Una de las formas más fáciles de conocer el pH del agua o del sustrato, es adquirir un medidor de pH. En este caso, también hará falta un lavado de raíces para reiniciar el contador de pH.
Bajas temperaturas
Un entorno con una temperatura inferior a 10ºC provocará que las hojas se vuelvan amarillas. En algunas variedades pueden tornarse incluso violetas y azules, y sufren necrosis.
Solución
La solución es simple: ajustar la temperatura al cuarto de cultivo o aumentar la luz. En el caso de tener bajas temperaturas en exterior, la planta ha de cubrirse por la noche.
Al igual que es importante conocer las posibles causas negativas por las que las hojas de la marihuana pueden teñirse de amarillo, también es menester saber cuándo es normal que tengan este color y, por lo tanto, no debe ser señal de alarma. Básicamente existen dos casos: la conclusión de la floración, al retirar los nutrientes con el lavado de raíces final; y en los momentos en los que la planta necesita desprenderse de las hojas de abanico más viejas.